1......
Sigo caminando siguiendo mi estrella al norte, nunca faltan los obstáculos, siempre regresan mis fantasmas.
El viento sopla y se manifiesta con besos sabor a fruta prohibida, dulces roces y lágrimas compartidas que refrescan sentimientos perdidos en el aire y en tiempos pasados.
La margarita eterna se deshoja sin temor a acabarse, sintiendo siempre la duda del “me quiere o no”. La espera continua de ilusiones correspondidas; las luchas épicas en tiempos modernos ya no son moda mientras en mis pasillos internos se enciende una luz, allí donde a tientas trato de encontrar un aliento para compartir, querer, amar.
Un beso, según quien lo de, puede ser una estocada, un tiro de gracia, un corte de arteria o más bien un disparo que de la partida para los 100 metros planos, quizá mil, quizá para la carrera sin llegada de una vida que cumplió su primera mitad.
¿Hasta cuándo tendrás que esperar niña mía, para cruzarte finalmente en mi accidentado camino?
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SABOR A FRUTA
- Evoco tu sabor cada vez que una canción se repite y saboreo las huellas que dejaron tu sonrisa en la tarde, cuando pude ser testigo privilegiado de tu existencia.
- Se siente el sabor de ti en el aire cuando recuerdo, se siente el sabor dulce cuando sonríes y también se siente el sabor amargo cuando estás triste, cuando filtras impotencia por los ojos, cuando te marchas.
- Se siente el fruto de tu vientre, su nombre no es Jesús.
- Se sienten tus sabores a fruta prohibida, se espera siempre encontrarte fresca, roja y brillante, aunque nunca redonda, pero sí linda…manzana.
- Siento en el aire tu grata compañía y siente tú mi cariño en las semillas de tu corazón…
3....
Probé el silencio de su boca. Probé la ausencia de sus palabras, pero sentí la pureza de su alma mientras nuestros labios se entendieron. Conversé con sus lágrimas e inventamos una forma de querernos y con eso anidé la confianza de su cariño...
4....
Eres una extraña y feliz compañera, amiga y novia con quien estaré siempre.
